La influencia de la conciencia de marca en nuestras decisiones de compra es un hecho conocido, pero ¿habías pensado que esta influencia tiene un impacto real y directo en nuestro cerebro?
Un estudio de 2020, titulado «The Influences of Brand Awareness on Consumers’ Cognitive Process: An Event-Related Potentials Study,» ha demostrado cómo la percepción de una marca afecta la actividad cerebral y el nivel de atención que dedicamos a un producto.
Índice del artículo
¿De qué trata el estudio?
El experimento analizó cómo los consumidores reaccionan ante marcas con diferentes niveles de conciencia de marca utilizando electroencefalografía (EEG), una técnica que mide la actividad eléctrica del cerebro. A través de imágenes de teléfonos con alta y baja conciencia de marca, se midió la respuesta cerebral de los participantes.
Los hallazgos más interesantes:
- Menos esfuerzo cognitivo para marcas conocidas: Los participantes mostraron una menor actividad cerebral cuando veían imágenes de teléfonos de marcas reconocidas en comparación con marcas menos conocidas. Esto indica que el cerebro procesa de manera más eficiente y requiere menos atención para reconocer marcas con alta conciencia.
- Mayor esfuerzo para marcas desconocidas: En cambio, las marcas menos conocidas generaron mayores picos de actividad en dos componentes cerebrales específicos, el N2 y el P3. Esto sugiere que el cerebro necesita más recursos cognitivos para procesar y reconocer estas marcas.
¿Qué implica esto para el mundo del branding?
Este estudio demuestra que la conciencia de marca no solo afecta nuestras decisiones de compra, sino también cómo nuestro cerebro distribuye la atención. Las marcas conocidas tienen la ventaja de «ocupar menos espacio mental», lo que facilita su reconocimiento y preferencia en situaciones de compra.
El hecho de darnos a conocer, divulgar y ser parte de la vida de las personas, consiguiendo estar en su top of mind, será clave para ganar notoriedad y autoridad, pero sobre todo posicionamiento.
Para ello será principal valorar la relación que creamos y construimos con las personas, como marca. Tener definido nuestra personalidad, carácter y valores, para poder relacionarnos.
Reflexiones finales
La ciencia nos muestra que el branding es mucho más que simples campañas de marketing; se trata de cómo logramos «grabar» la marca en la mente de las personas. Las marcas que consiguen establecer una fuerte conciencia logran una ventaja competitiva inconsciente, generando un impacto duradero en la mente del consumidor.
En pocas palabras: el branding impacta directamente en cómo percibimos, procesamos y nos relacionamos con las marcas a nivel cerebral.
¡Interesante, ¿verdad?!
Si quieres leer más sobre el estudio completo, lo encuentras aquí 👉 Enlace al estudio.