Una marca se puede registrar legalmente a nivel denominativo (solo el naming, tagline…), a nivel gráfico (su isotipo, logotipo…) o ambas. Cuando se hace efectivo es cuando hablamos de una marca registrada.
El registro debe realizarse de manera legal, normalmente pagando unas tasas o impuestos. De esta manera se logra exclusividad de uso y explotación de la marca.
En España se realiza en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
Es imprescindible para la protección de la marca frente a suplantación o mal uso de la marca.
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